Quatretondeta: Els Frares, Peña Moro y Forat de África

Siempre que hemos pasado por delante yendo a otras rutas, esta cordillera de montaña, con agujas o cuchillos impresionantes nos ha llamado poderosamente la atención. Este verano los Mallos de Riglos, nos recordó que teníamos pendiente acercarnos más a ellos. Así que no nos lo pensamos más y el 28 de noviembre del 2021, iniciamos un recorrido para contemplar Els Frares de Quatretondeta, unas formaciones extraordinarias de la Sierra de la Serrella, que algunos nombran como «el Pirineo alicantino». La disfrutamos mucho a pesar de las fuertes ráfagas de viento que superaban los 60km/h. La roca esculpe los contornos del continente de África, un rincón mágico. 

A continuación, el enlace a las recomendaciones de rigor y avisos importantes a tener en consideración antes de emprender actividades de senderismo, así como la ficha técnica de la ruta:

ENLACE A RECOMENDACIONES Y AVISOS IMPORTANTES

Nos dirigimos hacia la población de Quatretondeta, os dejamos,a continuación, las coordenadas donde poder aparcar el coche: 

En este punto empieza la ruta, por una pista ancha, donde a unos 100 metros aproximadamente, se puede encontrar sitio para aparcar. Nosotros la iniciamos con la hora azul. 

Este primer tramo es cómodo. La pista tiene algunos charcos de agua con hielo debido al frio de esta mañana. Pronto, llegamos a una bifurcación, donde domina una centenaria carrasca, seguimos por la izquierda, bordeando campos de oliveras y almendros.  

Poco a poco, la vegetación va cambiando conforme vamos cogiendo altura, y con un sendero más estrecho nos encontramos con pinos y plantas de maquis. Las imponentes agujas de los Frares son cada vez más impresionantes. 

La fuente del Espinal es nuestro siguiente punto de referencia. Hacemos hincapié a no desviarse nunca de los caminos oficiales para las rutas, por respeto a la naturaleza y por la propia seguridad. Aun así, en los meses de caza, podemos encontrar vainas vacías de cartuchos en este precioso paraje, en el mismo sendero, que recogimos.

Tras pasar la fuente, nos espera una subida pronunciada con la senda más pedregosa hasta llegar a un cartel que nos indica una ida y vuelta por la pedrera, máximo hasta la horadada. Debemos respetar el camino trazado para evitar la erosión y mantener las maravillas, que nos ofrece la naturaleza. Advertencia, tramo no apto para las personas con vértigo. 

Es abrumador, descubrir cómo se ha podido formar semejante belleza, cada rincón parece trabajado, esculpido para ofrecernos unas peculiares formaciones. Debemos extremar las precauciones en este tramo. 

Las vistas son asombrosas, tanto desde la perspectiva de esta altura, como el acercamiento a estas figuras de piedra. Desistimos llegar hasta la Cova Foradada, debido al fuerte viento que sopla. 

Las piedras cubren como un autentico manto la pendiente de este recorrido. Amedrenta un poco fijar la vista, pero es un privilegio poder hacerlo. 

Emprendemos la vuelta hasta el cartel de la entrada de la pedrera, para seguir subiendo un poco a nuestra derecha. El sendero se va estrechando y con algunos tramos menos pedregosos, bordeando el Barranco hondo. 

Llegamos a un paso un poco más angosto: el Passet. Seguimos por un sendero mucho más estrecho, al borde del barranco. Aquí se debe extremar la precaución tanto al ir como más tarde al volver. Pasamos por dos pedreras consecutivas pero con un poco más de ancho.

Las imágenes de este paraje son sublimes. No queda mucho para llegar a la Font Roja. 

Un abrevadero, que hoy tiene su agua congelada y una mesa de picnic, conforman la Font Roja. Un paraje muy bonito para descansar un ratito y observar la zona. También es donde se cruzan varios caminos para seguir las distintas rutas de senderismo. 

Tomamos la senda hacia Benasau, el sendero se ensancha y es mucho más cómodo a través de un bosque de pino.

Desde aquí percibimos unas fabulosas vistas de la sierra de Bernia, con el mar de fondo. Seguimos esta senda forestal, hasta llegar a un tanque de emergencia contra incendios. Subimos por su derecha por una pista de cemento hasta adentrarnos en un frondoso bosque de pinos.  

Casi de inmediato, nos encontramos con tres senderos, seguimos por el del medio para asomarnos a la Peña del Moro, para contemplar desde este punto la magnificencia de las agujas de los Frares, con unas vistas increíbles.

Observamos multitud de champiñones dada la humedad de este bosque. Regresamos  sobre nuestros pasos y volvemos a contemplar las increíbles vistas desde este paraje de la Sierra de Bernia, el Benicadell, la sierra de Aitana…Al llegar  al deposito, seguimos de frente por un pequeño sendero. Una ida y vuelta.  

Subimos por un sendero pedregoso para ganar un poco de altura y disfrutar de otra perspectiva de este encantador y mágico rincón. 

Regresamos al depósito de agua contra incendio y seguimos por el camino de la derecha por donde llegamos. Pronto, el camino bifurca y seguimos por la derecha para dirigirnos al Forat de África. Llegamos a un collado, a nuestra derecha, tomamos un pequeño camino muy pedregoso, alcanzamos la cima. 

Un sorprendente contorno agujereado en la pared de la roca, dibuja y evoca al continente africano, es la Peña de África, simplemente fabuloso.

Con estas vistas increíbles, reanudamos la marcha para retomar el camino de vuelta y volver a pisar por donde iniciamos el recorrido.

El abrevadero de la Font Roja sigue con su agua congelada, Travesamos las dos pedreras, nos despedimos de  la carrasca centenaria. Echamos unas últimas ojeadas a este fantástico paisaje. Prometimos volver. 

Una ruta recomendable, por su gran belleza, salvo para las personas con vértigo. La disfrutamos muchísimo a pesar del fuerte viento de esta jornada.  

 

 

 

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Hasta la próxima aventurer@s!!!