Castell de Castells: Morro blau y Cim de la Xortá
Preludio a la entrada del verano, nuestra ruta del 20 de junio del 2021, se centra en un paraje magnifico, tanto por sus vistas, durante todo el recorrido, como en las dos cimas más elevadas: Morro Blau (1125m) y Cim de la Xortá (1219m). Cabe destacar, el entorno colorido en esta época. Deslumbra la cantidad de plantas e insectos endémicos, que tienen en este enclave, su hábitat. Hemos tenido la suerte de poder observar, a cierta distancia, el vuelo majestuoso e impresionante de dos águilas. Destacable, el sonido embriagador de los cantos de los pájaros y aves silvestres. Un lujo, a la vez, que un gozo.
A continuación, el enlace a las recomendaciones de rigor y avisos importantes a tener en consideración, antes de emprender actividades de senderismo, así como la ficha técnica de la ruta:
ENLACE A RECOMENDACIONES Y AVISOS IMPORTANTE:
Nos dirigimos hacia la población de Castell de Castells, donde aparcamos en un parking municipal, apenas entrar al pueblo. Estas son las coordenadas:
Denominamos esta ruta «hibrida», puesto que varios tramos de la misma, coinciden en su trazado. En el mismo, incluimos tres circulares, que empezamos siempre por la izquierda (sentido horario). Imprescindible llevar GPS. Nada más salir del parking, tomamos una calle estrecha, que nos lleva a la fuente fuera del pueblo. Cruzamos la carretera en el segundo indicador (al Portet de Castells). (El primero es por al área recreativa del Castellet, donde regresamos).
Primeramente, emprendemos una subida continuada, alternando pista de hormigón y pista de tierra, bastante cómoda. Impresiona la variedad y multitud de especies florales e insectos. Un colorido paseo, que disfrutamos y nos permite descubrir nuevos artrópodos (abejas carpinteras) y vegetación.
Andamos el camino, con unas vistas que son un regalo para los sentidos. Formaciones rocosas, naturaleza, paisajes con contrastes de colores y olores.
Ahora, la senda serpentea sin perder un ápice de altura. No obstante, es ameno a sabiendas, que todo el recorrido supera los 20 kilómetros, con un desnivel de más de 1000 metros, pero merece ampliamente el esfuerzo (Se puede acceder con coche hasta el Morro Blau). Nosotros preferimos vivir la ruta.
Seguimos a la derecha hacia el Castellet (PR-CV149). En la siguiente intersección, giramos a nuestra izquierda, para continuar hacia el cim de la Xorta. El camino se vuelve un poco más pedregoso. Dejamos a nuestra izquierda, la senda para ir a la Fonteta de l’Ombria. Agradecemos la ombría de la arboleda, flanqueamos una pared impresionante, desde la senda.
Hoy, es día de estreno de bastón de montaña! Acompañamos la senda en un zig-zag permanente, que sube y sube, sin dejar de apreciar unas fantásticas panorámicas del valle, hasta alcanzar la caseta del tío Alcoiá. Tuvimos la inmensa suerte, de poder gozar del espectáculo del majestuoso vuelo de dos águilas.
Además, estamos acompañados de coloridas mariposas y otros insectos. A nuestra derecha, una pared de formaciones rocosas y a nuestra izquierda, se abren las vistas sobre el valle. La subida sigue gradual en algunos kilómetros.
Podemos observar una pedrera y más adelante un deposito de agua para incendios. Ahora volvemos a alternar con tramos de hormigón y pista forestal. A lo lejos divisamos la caseta del forestal.
Tenemos un día de calima, pero, así y todo, las vistas son magnificas. Visualizamos hasta el mar en el horizonte. En pocos metros, alcanzamos el Morro Blau (1125m), junto a la caseta se encuentra el punto geodésico. Bordeamos la caseta, para entusiasmarnos de la belleza del panorama de 360 grados, que nos ofrece este punto.
Inmediatamente, seguimos por una senda comodísima, donde la vegetación es más frondosa y con arboleda, para llegar al refugio, donde aprovechamos la tranquilidad del lugar para descansar y comer, antes de emprender una subida con más pendiente.
A partir de aquí, tomamos el sendero pedregoso y estrecho, detrás del refugio, para emprender una subida, flanqueados por una pared, a nuestra izquierda. Las vistas impresionantes, como las estamos disfrutando, durante todo el recorrido.
Seguidamente, otra subida a la izquierda. Con un poco más de sacrificio, logramos llegar a una arboleda. Debemos guiarnos, con las marcas blancas y amarillas, en las piedras. Extremando la precaución, conseguimos subir este tramo de la cima de la Xortá.
La estancia en este lugar mágico, nos parece poco. disfrutamos un buen rato de este enclave. Asoma a lo lejos, la punta de la Sierra de Bernia. Nos encontramos rodeados de montañas emblemáticas de las cimas alicantinas: la Serrella, la Canal, los picos Mallada del LLop, el Puig Campana… Verdaderamente abrumadoras.
Proseguimos a bajar por donde hemos subido. Apreciamos ruinas desde esta altura. Ahora, es necesario, disponer de GPS, para poder seguir la ruta, que adivinamos, encontrando tramos de sendero, más marcados que otros. Bordeamos una gran roca, por la derecha, para llegar a unas ruinas.
Poco a poco, bajamos suavemente por un estrecho sendero, cómodo, que nos sigue sorprendiendo por su belleza. Podemos observar a curiosos insectos como la «Agelena labyrinthica» llamada comúnmente «araña del embudo», ó también como «araña del laberinto», mariposas que parecen plumas… Y multitud de especies florales que colorean el camino: Centrantos, Campanillas sylvestres, Estrella de mar, Digital de grandes flores, Blackstonia perfoliata… Así como la Serrella en todo su esplendor.
Nos adentramos, nuevamente, en una arboleda, cuya ombría agradecemos. Reandamos el camino, hasta llegar a un cartel indicativo, señalizando la área recreativa del Castellet, donde nos dirigimos.
La arboleda deja paso a abiertos, con bajada más pedregosa. Apreciamos una imagen más cercana del pueblo de Castell de Castells. Nos queda menos para llegar a él.
Desembocamos en la primera entrada que vimos por la mañana, cruzamos la carretera, pasamos una vez más al lado de la fuente y entramos al pueblo, adornado por flores moradas de alcachofas hasta el parking.
Una ruta, que enamora los sentidos. Larga, pero preciosa y cómoda, con mucho desnivel, muy coloreada con miríadas de plantas e insectos. Nos debemos de preservar la riqueza de su biodiversidad, todo un tesoro. Oteamos vistas de ensueño. Recomendable para los más atrevidos. Una autentica aventura, que nos entusiasmó mucho. La montaña hay que vivirla!
A continuación, os dejamos, los enlaces a nuestras fotografías en Facebook y los tracks de Wikiloc y Relive:
Hasta la próxima aventurer@s!!
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