Ruta en coche por los acantilados asturianos.
Casi al final de nuestra estancia por Asturias, el penúltimo día decidimos hacer algo distinto a lo habitual, así que organizamos una ruta en coche en la que recorrimos los acantilados más espectaculares de la costa asturiana. Esta ruta recorre los siguientes lugares: Luarca – Busto – Cadavedo – Playa del silencio – Cabo Vidio y Cudillero. A continuación os contamos los detalles de nuestro paso por cada uno de estos maravillosos rincones.
Durante unos días estuvimos alojados en Tineo (Asturias), el penúltimo día nos despedimos de esta localidad y pusimos rumbo hacia Luarca, nuestra primera parada. Nos dirigimos más concretamente hacia la Ermita de Nuestra Señora la Blanca, en la siguiente ubicación de Google Maps:
UBICACION LUARCA, ERMITA NUESTRA SEÑORA LA BLANCA.
Aparcamos el coche en la misma carretera que lleva hacia la ermita, desde donde tenemos unas vistas preciosas del puerto.
Caminamos por la carretera hacia la ermita, junto a la cual se encuentra el cementerio donde está enterrado Severo Ochoa, un famoso científico español. Desde este punto observamos el primer acantilado de nuestro recorrido.
Abandonamos Luarca para dirigirnos a nuestra segunda parada, en Busto, donde además de disfrutar de las espectaculares vistas, pudimos probar los mejores pasteles que hemos comido hasta el día de hoy. En la siguiente ubicación de Google Maps, os dejamos las coordenadas que nos lleva hasta el faro de Busto:
UBICACION FARO BUSTO GOOGLE MAPS.
Aparcamos el coche en la explanada que hay cerca del faro, situado sobre unos imponentes acantilados.
Caminamos por un pequeño sendero hacia el faro, disfrutando del paisaje hasta llegar al mismo. Este sendero continua durante 7 km.
Tras la visita al faro volvemos al coche para dirigirnos hacia el pueblo. Teníamos el gusanillo de probar las delicias de la famosa pastelería de Busto. Todo un placer para el paladar ya que están hechos con ingredientes naturales de su propia cosecha. La pastelería se encuentra en la siguiente ubicación de Google Maps:
El exterior de la pastelería es atípico a lo que normalmente vemos en este tipo de establecimientos. Después de comprar los pasteles en su interior, puedes disfrutar comiéndotelos en su preciosa terraza al aire libre. En nuestro caso tuvimos el privilegio de poder probar un pequeño surtido de estas maravillas.
Si tenéis ocasión no dejéis de acercaros a este emblemático lugar. Tras la degustación emprendemos de nuevo el viaje hacia nuestra tercera parada en La Ermita La Regalina, en Cadavedo. Para ello, nos dirigimos hacia la siguiente ubicación de Google Maps:
UBICACION GOOGLE MAPS ERMITA LA REGALINA, CADAVEDO.
Aparcamos el coche junto a la ermita, donde hay una buena explanada para poder pasear y acercarse a los acantilados.
En este acogedor y tranquilo lugar nos sorprende una vista panorámica y prácticamente de 360º de la zona. Por una parte los acantilados y por la otra, la playa de la regalina, donde bajaremos más tarde. La pequeña ermita pintada de azul da un halo de paz al llegar.
Tras disfrutar de las vistas durante un buen rato decidimos bajar a la playa de La Regalina a probar las frescas aguas del mar asturiano. Durante la bajada nos encontramos con una casa típica asturiana llamada Hórreo.
Desde la ermita, hay una pequeña carretera que baja hasta la playa, donde encontramos un pequeño parking. La playa se encuentra flanqueada por dos acantilados que la dotan de una gran belleza, nos dimos un chapuzón y podemos asegurar que incluso en pleno agosto el agua estaba helada.
Tras el refrescante baño, volvemos al coche para dirigirnos a nuestra cuarta parada: La playa del silencio, una de las playas más bonitas de toda la costa de Asturias. También la más concurrida de todas las que visitamos ese día, tanto para aparcar como para bajar hasta la playa. Para llegar hasta el parking podéis seguir la siguiente ubicación de Google Maps:
UBICACION PARKING PLAYA DEL SILENCIO.
Llegamos al parking y aparcamos de suerte ya que se encontraba prácticamente lleno. Se paga 2€ para dejar el coche en una explanada que hay junto a los acantilados, para después bajar por una senda hasta la playa.
Las rocas afiladas y sus impresionantes paredes rocosas hacen de escudo natural, protegiéndola del oleaje y creando un remanso de aguas tranquilas y silenciosas, de ahí su nombre.
Debido al impresionante aforo de gente decidimos seguir nuestro camino hacia otra playa más tranquila, la cual se encuentra en nuestra siguiente parada: El Faro de Cabo Vidio. Para llegar al mismo seguimos la siguiente ubicación de Google Maps.
La carretera que lleva al faro, transcurre por encima de los acantilados y es un disfrute visual. Junto a la misma encontramos distintos huecos para poder aparcar el coche, llegamos al faro donde disfrutamos de las mejores vistas del día ya que desde ese punto se ve toda la costa.
Desde el faro tenemos amplia visión de la costa a ambos lados. Un gozo!.
Desde la altura divisamos una pequeña playa prácticamente desierta y decidimos bajar por un pequeño sendero para comer y tomar el baño tranquilamente.
Tras descender durante unos 10 minutos por el zigzagueante sendero, llegamos a la playa de guijarros, en la cual habían 4 personas. Buscamos un lugar sombreado, junto a las paredes del acantilado para pasar unas cuantas horas en la playa, un lujo, que deja un recuerdo imborrable.
Tras disfrutar de una tarde de playa en un entorno espectacular, emprendemos nuestra marcha con mucho pesar de tener que abandonar un rincón tan encantador.
Nuestra última parada nos lleva a Cudillero, un pintoresco pueblo de gran atractivo turístico. Para llegar al mismo nos dirigimos hacia su puerto y aparcamos el coche en el mismo, ya que la entrada al pueblo en coche se hace prácticamente imposible, debido a la gran afluencia de gente. Seguimos la siguiente ubicación de Google Maps:
Aparcamos el coche en la explanada del puerto, el cual visitamos caminando sobre sus diques y observando como rompen las olas en él.
Desde el puerto caminamos unos minutos hasta llegar a la entrada a Cudillero, la cual parece una acuarela.
Entramos en el pueblo y callejeamos por todos sus rincones, se trata de una localidad muy turística con abundantes tiendas de souvenirs y restaurantes. Aquí damos por finalizada esta jornada disfrutando de una buena cerveza en una de las terrazas de la entrada del pueblo.
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A continuación, os dejamos el enlace al álbum de las fotografías en nuestra página de Facebook:
Hasta la próxima aventurer@s!!!
