Château de Pierrefonds – Castillo de Pierrefonds
La segunda visita del mini tour de castillos franceses, tras el de Compiègne, es el de Pierrefonds en la región de Hauts-de-France, a principio del mes de agosto del 2023. Cuanto más peculiar en sus formas, su estructura…hechiza la vista, y aunque no prevista, su corta estancia yendo hacia el Château de Chantilly es imprescindible. Habitan huellas del pasado en cada rincones, reminiscencias de historias de varios siglos, desde el XI hasta nuestros días. Como siempre dado el apremio del tiempo, se quedaron detalles y salas por descubrir, motivo para poder volver a esta emblemática fortaleza. que ofrece actividades y exposiciones para todos los públicos.
El castillo de Pierrefonds reconstruido por el arquitecto Eugène Viollet-Le-Duc, bajo la orden de Napoleón III a partir de 1857, encarna la alianza entre reconstrucción arqueológica y visión idealizada de la Edad Media. Construido al final del siglo XIV por Luis de Orleans, hermano de Carlos VI, deseoso de asentar su prestigio artístico y militar, será desmantelado bajo la orden de Luis XIII en 1617.
Su visita está concebida como una lección de arquitectura militar y palaciega de principio del siglo XV, permite descubrir el sistema defensivo completo de un castillo fortificado, circulando por su puente levadizo y el camino de ronda, así como comprender la organización y el fasto de la vida señorial a través del decoro reconstituido como el de la «salle des Preuses» o de los apartamentos imperiales situados en la mazmorra.
Se accede a la corte de honor tras pasar el puente levadizo y una imponente estatua de un caballero sobre su montura da la bienvenida a los visitantes. Innombrables piezas de piedra pueblan desde las escaleras hasta los techos, a sus anchas, gatos, águilas, dragones…Le sigue en una interesante perspectiva, un león alado en cobre martillado. Continuando la visita se llega a una peculiar y pequeña capilla interior en un patio central.
Lamentablemente debido a su restauración, muchas salas se encontraban cerradas al público. No obstante, pude apreciar peculiares detalles del bestiario medieval creados por el arquitecto, así como los símbolos y emblemas, como las abejas y águilas reales, de la época imperial de Napoleón I, o la salamandra de Francisco I y tantos otros.
Erase una vez, un castillo de cuento de hadas, cerca de Paris, cuya visita no os podéis perder, si tenéis ocasión. Miríadas de detalles, frescos de plantas y animales, su arquitectura y su parque, no os dejaran indiferentes. Al final del recorrido, una maqueta nos muestra la prolijidad de Viollet Le Duc para plasmar y aunar tanta genialidad en un mismo recinto. Tengo la excusa perfecta para volver en un futuro…
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Hasta la próxima aventurer@s!!!
